La cadena de tiendas de descuento D1 rompió su silencio frente a las graves denuncias sobre presuntas malas prácticas laborales, difundidas recientemente por medios nacionales. Según lo revelado, habría empleados trabajando bajo condiciones excesivas, sin la debida remuneración por horas extras y con sobrecarga de funciones.
En respuesta, la empresa negó categóricamente tales afirmaciones y aseguró que respeta plenamente la legislación laboral vigente. A través de un comunicado, subrayó que todos sus trabajadores tienen contratos formales y que promueve espacios de diálogo con los sindicatos para garantizar condiciones justas y transparentes.
El Ministerio del Trabajo, encabezado por Antonio Sanguino, anunció que iniciará una investigación para verificar la veracidad de las denuncias. D1, por su parte, expresó estar totalmente abierta a colaborar con los entes de control y confía en que el proceso se desarrollará con objetividad.
Finalmente, la compañía hizo un llamado a evitar la desinformación y reafirmó su misión de democratizar el consumo en Colombia, resaltando que llega al 90 % de los hogares del país con precios bajos y calidad garantizada.